Remojar y lavar al menos 7 veces 2 tazas de quínoa. Llevar a fuego en una cacerola, añadir 3 tazas de leche y 1 taza de crema.
Revolver, añadir ½ taza de azúcar rubia, un chorrito de extracto de vainilla.
Seguir cocinando hasta que la quínoa haya absorbido todo el líquido. Retirar del fuego y dejar enfriar. Servir en vasos o frascos con miel, copos de crema y frutas frescas y secas.