Comenzamos pelando y cortando las manzanas en láminas de 4 milímetros. Luego las ponemos a macerar con una mezcla de agua, coñac y la mitad del azúcar durante 15 minutos.
Seguidamente, fundimos la manteca y con un pincel pintamos las láminas de masa filo.
Precalentamos el horno a 180ºC.
A continuación, colocamos la mitad de las láminas en el fondo del molde de manera que se forme una especie de bol, rellenamos con la manzana, el huevo batido y la crema y espolvoreamos con el azúcar restante.
Agregamos el resto de las láminas agrupándolas para darle cuerpo.
Espolvoreamos con el azúcar glasé y la llevamos al horno a 180º C durante 40 minutos.
Cubrimos con papel de aluminio cuando empiece a dorarse para que no se queme la preparación.