Masticar, una rica y sana costumbre

Este año Masticar vuelve rozagante Más de todo. Más variedad de clases, más productos en el Mercado, más puestos de comida, más metros cuadrados y doble acceso al predio. A.C.E.L.G.A –Asociación de Cocineros y Empresarios Ligados a la Gastronomía Argentina– te invita a preparar la lista de compras con las primeras sopas y guisos en mente con productos de estación.

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Este otoño, Masticar copará el barrio de Palermo de la Ciudad de Buenos Aires del jueves 5 al domingo 8 de mayo, en el ya clásico predio de El Dorrego, al que se suman más de 4.000 metros cuadrados del lindero Club Polideportivo Colegiales.

Este año también habrá dos accesos que generarán una mejor circulación, con más espacios para comer y pasarla bien: un ingreso y boleterías en el cruce de las calles Concepción Arenal y Conde, y un segundo ingreso para entradas anticipadas e invitados HSBC Premier en Zapiola 50.

Bajo el lema “Comer rico hace bien”, en esta quinta edición el campo vuelve a la ciudad. El cocinero se reúne con el productor rural de frutas y verduras, con el marisquero, el maestro quesero, el fiambrero, el panadero. Ellos traen lo que mejor saben hacer; esa materia prima con la que trabajan durante los 365 días del año con verdadera pasión: frutas, verduras y productos de gran parte de la Argentina.

El Mercado es el gran corazón de la feria y este año latirá aún más fuerte. Reúne a más de 80 queridos productores rurales provenientes de más de 20 provincias de todo el país. Ellos compartirán los secretos de las diversas y más ricas formas de cocinar sus productos. Algunos de ellos son: sal marina, langostinos y variedades de mariscos de Chubut; zapallos en sus variedades anco, angola y criollo; exquisitas manzanas y peras de variedades antiguas del Valle del Río Negro; bananas, limas, mangos y maracuyás de Misiones; especias como comino, pimentón y anís de Salta; granadas de San Juan; paltas y quesillo de Tucumán; sales y hierbas de altura de Jujuy; vinagre de Torrontés de Mendoza y vinagre de sauco y de frutas rojas de Bariloche; hongos shiitake, gírgola y morilla; ostras orgánicas de Río Negro; papines andinos; hierbas serranas de Córdoba para infusiones; quesos y miel de Buenos Aires (¡con extractor de miel en vivo!); brotes verdes de Buenos Aires; castañas (que se tostarán in situ); dulce de leche; salames y exquisitos panes.

Será una fiesta del comer y del beber multitudinaria como las anteriores, pero de más fácil acceso. Comer rico hace bien y si se esta cómodo, mejor. En la presentación el viernes pasado pude probar algunos de los deliciosos bocados de los Food trucks, con un plato estrella bandejeado, firmado Dolli Irigoyen: dos risotti excepcionales, con alma vegetal.