El pastel de boda, la unión entre el sabor y el estilo

La torta o pastel de casamiento representa un instante especial de la fiesta. Es un momento emotivo en el que la unión de la pareja con la familia llega a su materialización con el corte inicial que se realiza a dúo por la pareja.

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Pero para llegar a ese momento, los novios efectuaron una serie de elecciones para decidir el pastel que más se ajuste a sus gustos. Pues hay gran variedad de tortas y pasteles de casamiento con distintos ingredientes, formas y estilos.

Hay quienes optan por un clásico “Pastel torre blanco” y hay quienes, más informales, prefieren disminuir el tamaño, ganando en variedad, con distintas posibilidades de tortas a elección. Siempre es conveniente elegir sabores clásicos que resulten amigables al paladar de la mayoría de los invitados. Así los más elegidos son los pasteles rellenos de dulce de leche, con crema o bañados en chocolate. Aunque puede haber variedad de tortas, solo una será la que utilicen los novios para el corte inicial y brindis.

El corte de torta deviene de una ancestral tradición que hunde sus raíces en tierras desde donde proviene la civilización occidental: la antigua Roma.

La costumbre guiaba a la novia a cortar la torta con la espada de su marido, quien apoyaba su mano sobre la de ella como señal de fortaleza, cuidado y unión del uno con el otro.

Pero luego de este rito ancestral llega el momento de la verdad: el de comerla. Y aquí es donde el buen aspecto y la presentación debe unirse en matrimonio con el sabor.

Aquí te dejamos la receta del Pastel de bodas con mazapán y almendras.