- Aplastar el ajo con un poco de sal, hasta formar una pasta.
- Lavar la carne de conejo y recubrirla con la pasta de ajo y sal.
- Poner el conejo en una olla con la cebolla cortada en cubitos, el azafrán, la mantequilla, las especias, el jugo de limón y 1 litro de caldo de pollo.
- Cubrir con agua y llevar hasta el punto de ebullición.
- Una vez que hierva, bajar el fuego y cocinar a fuego lento durante 1 hora.
- Retirar el conejo de la olla, dejar enfriar en una bandeja y desmenuzar.
- Mantener el líquido de cocción en el fuego, hasta que se reduzca a la mitad.
- Incorporar los huevos batidos y cocinar entre 5 u 8 minutos, hasta que los mismos se empiezan a cuajar.
- Derretir la mantequilla y pintar con ella el fondo de un molde para pasteles.
- Empezar a colocar capas de pasta filo para ir pintándolas con más mantequilla derretida.
- Colocar una primera capa de mezcla de huevos y cubrir con más hojas de filo con mantequilla.
- Hacer otra capa con la carne, cubrirla con más pasta filo y agregar una última capa de almendra molida.
- Pintar con huevo y hornear a 180ºC durante 20 minutos.