Luego, vamos calentando una olla con aceite de oliva y añadimos un ajo pelado entero y lo doramos. Mientras tanto, cortamos el pollo en trozos de tamaño de bocado.
A continuación, incorporamos el pollo en la olla para dorarlo.
Cuando el pollo esté dorado, lo retiramos y en esa misma olla doramos la cebolla, la manzana, la piña y el jengibre, en ese orden. Cocinamos unos minutos todos los ingredientes para que se integren bien todos los sabores.
Seguidamente, agregamos la pasta de curry y el curry en polvo. Revolvemos y vertemos la leche de coco y el caldo de pollo. Cocinamos unos minutos hasta que esté todo bien integrado.
Le agregamos la ralladura de la lima y dejamos reducir a fuego medio.
A continuación, trituramos la salsa y la colamos para que quede bien líquida. Luego, agregamos el pollo. Lo dejamos que cocine de nuevo unos minutos.
Para terminar, emplatamos el pollo y acompañamos con arroz basmati cocido y unas pasas por encima.