En el bol de una batidora, mezclar el agua, la levadura seca, el azúcar y 220 gramos de harina. Integrar con una cuchara de madera hasta formar un engrudo sin grumos.
Añadir el aceite de oliva, el resto de la harina y la sal. Llevar a la amasadora con gancho y trabajar hasta que se despegue de las paredes del bol. La masa debe quedar lisa y liviana.
Llevar la masa a una superficie enharinada y formar un bollo con las manos. Devolver al mismo bol, agregando un chorro de aceite de oliva para humedecer toda la superficie del bollo.
Tapar con película de PVC y dejar levar por 120 minutos.
Transcurrido el tiempo, retirar del bol, espolvorear con harina y estirar con las manos. Cortar en 8 porciones y realizar pequeños bollos con las manos.
Colocar en una placa enharinada, tapar y dejar levar por 45 minutos.
Estirar suavemente con los dedos, espolvorear con harina y dar forma con un rodillo. Dejar reposar tapado por unos minutos.
Llevar a una plancha bien caliente y dorar suavemente de ambos lados. Dejar cocinar hasta que se inflen en su interior. Retirar y dejar tapado con un paño.