Maceramos el matambre durante una noche cubierto de leche, las hojas de laurel y el ajo.
Retiramos el matambre de la maceración en leche y llevamos a una parrilla a fuego medio del lado de la grasa hasta que esté dorado.
Cuando esté dorado, damos vuelta y continuamos con la cocción.
Sobre la parte ya dorada agregamos salsa de tomate por toda la superficie, la mozzarella y condimentamos con sal, pimienta negra y aceite de oliva.
Cubrimos con una placa con brasas por encima para derretir la mozzarella. Una vez derretida, retiramos del fuego y terminamos con perejil picado y aceite de oliva.