Para comenzar, infusionamos la leche caliente con los saquitos de té. Pasado unos minutos, retiramos los saquitos y llevamos la leche a un bol.
Hidratamos la gelatina sin sabor con 2 cucharas grandes de agua. Llevamos por 20 segundos al microondas hasta que se diluya.
A la mezcla de té con leche le añadimos el azúcar, la taza de crema de leche, perfumamos con esencia de vainilla y la gelatina diluida. Mezclamos bien y llevamos la preparación a 2 cuencos.
Dejamos enfriar hasta que se solidifique y terminamos con miel, canela y hojas de menta.