Ponemos una plancha al fuego y doramos las piezas de carne por todas sus caras.
Cortamos el guanciale en láminas y lo doramos en una sartén.
En un bol ponemos un huevo y una yema, añadimos queso trufado rallado, la pimienta negra, la trufa negra rallada y un buen chorro de aceite de oliva virgen extra.
Mezclamos bien.
Servimos el lomo bajo cortado en tiras y decoramos con la carbonara y sal de trufa.