Desde que el chef francés Dominique Ansel decidió fusionar los sabores y la elaboración de dos grandes de la pastelería como las croissants y las donas, el cronut no ha reconocido fronteras. Las pastelerías de todo el mundo han tomado nota de este éxito nacido en Nueva York y han replicado la receta con matices regionales.
¿Qué es lo que hace tentador al cronut?
Está hecho con la misma masa con la que se realiza la croissant pero en lugar de enrollarse, se estira para luego ser cortada en forma de disco. El espesor varía de acuerdo al gusto del pastelero entre 1 y 2, 5 centímetros. Para terminar, se le hace un orificio en el centro y se la deja reposar para que fermente. Concluidos estos pasos, se fríen y se les agrega el glasé, chocolate o la ganache. El proceso si bien parece simple, lleva tres días. En principio, porque la masa de hojaldre se debe hacer dos días antes de la cocción. Sin embargo, hay recetas más sencillas para realizar en casa.
En América Latina, la llegada de los cronuts ha sido tímida pero promete dar batalla a los famosos
cup cakes. Es que, en las pastelerías de las grandes ciudades, donde se han comenzado a vender, han tenido una muy buena repercusión por parte de sus clientes.
En Europa empezó a ser furor meses después de que su inventor los lanzara al mercado. Muchas pastelerías adoptaron la idea e, incluso, comenzaron a fabricar sus propias versiones de esta delicia dulce.
Si aún no los has podido probar y te animas, te dejamos una receta para que lo intentes. ¡Suerte!
Receta fácil de cronuts (para hacer en casa)Ingredientes: 1 plancha de masa de hojaldre
Azúcar glasé
Aceite de girasol (para la fritura)
Crema pastelera (si desea)
Preparación: Para comenzar, espolvoreamos con harina la superficie donde vamos a trabajar la masa de hojaldre. En este caso, como la masa es comprada, debes doblarla hasta alcanzar el grosor deseado (lo ideal es entre 1 cm y 2,5 cm).
Una vez que tenemos estirada la masa, cortamos los círculos y le hacemos un orificio en el medio para que tome la forma de la dona. Las dejamos reposar por 30 minutos.
Por último, calentamos el aceite y las freímos a fuego medio. Las dejamos enfriar, espolvoreamos con azúcar glasé y ¡listas para comer!