Colocamos las ciruelas en remojo con una parte del vino tinto. Reservamos.
Por otro lado, limpiamos muy bien el foie con las manos con unos guantes. Lo disponemos en pedazos sobre una bandeja de horno cubierta con papel de hornear y salpimentamos.
Espolvoreamos con azúcar y mojamos con un chorrito de Oporto.
Horneamos a una temperatura de 250º durante 15-20 segundos para que apenas se ponga brillante.
Lo retiramos del horno y colocamos dentro de un molde o terrina forrado con papel de horno. Lo presionamos bien para que se compacte y tapamos con papel de horno con un peso encima. Lo reservamos en la heladera, al menos una noche.
Para la mermelada, mezclamos todos los ingredientes en un cacerola y llevamos a hervor hasta que el vino haya reducido hasta la mitad por lo menos. Apagamos el fuego, retiramos la canela y el anís y escurrimos las ciruelas del vino.
Trituramos las ciruelas y reservamos la mermelada.
Presentamos un trozo del foie con sal marina y una cucharada de la mermelada a un lado acompañado de las tostadas, grisines y panes.