Hasta no hace mucho en Uruguay no se la vinificaba como correspondía y el resultado eran vinos, muy astringentes. El Tannat uruguayo, como el Malbec argentino, están conquistando a los mercados internacionales, que claman por algo que no sea Cabernet Sauvignon. <br /><br />Los Tannat contemporáneos no tienen nada que ver con aquellos históricos y rústicos Harriague, los que hace añares fueran traídos por aquel inmigrante vasco, Don Harriague. Recuerdo haberlos tomado en damajuana en La Pedrera, cuando este lugarcete era salvaje, nada fashion. Nosotros, los de entonces ya no somos lo mismo. La Pedrera y el Tannat, tampoco. <br /><br />Bouza es una pequeña bodega que se ubica cerca de Montevideo, a la que prometo visitar. Queda a solo 10 minutos del centro, tiene un restaurante de platos regionales y una interesante colección de autos antiguos. La primera vez que escuché hablar de esta bodega fue a través de un eufórico Jean Paul Bondoux en La Bourgogne de Punta del Este. Tienen, entre otros vinos un corte, Mon vide eu, 2005 de Tannat, Merlot y Tempranillo. Sutil, complejo y equilibrado, muy onda europeo. El elegante Tannat de Bouza es perfecto para la picaña, ese corte brasilero- uruguayo tierno y sabroso. Otro blend interesante: Adagio Expresivo de Toscanini. Cabernet Franc, Merlot, Cabernet Sauvignon y Tannat, con notas complejas y bouquet emocionante. <br /><br />Reserva Privada de Familia Stagnari Tannat 2004, una bodega de Salto es un Tannat untuoso, sin nada de taninos agresivos, muy europeo. Premiadísimo. Tiene la tipicidad de esta difícil variedad, aunque me resultó algo corto. <br /><br />Para tener en cuenta: Río Colorado 2005 de Bodega De Lucca, blend de Cabernet Sauvignon, Merlot y Tannat. Punta del Este tiene una bodega flamante Alto de la Ballenas y un curioso Tannat-Viognier 2006. Estos son vinos jóvenes y marinos. Interesantes, aunque seguramente estarán mejor en algunos años, cuando las viñas alcancen madurez y equilibrio. <br /><br />La versión argentina de e la variedad la conocí hace unos años en San Juan. Con características diferentes, me asombró por sus aromas profundos y su textura, aunque poco tiene que ver con la Tannat uruguaya, tan marina. Bodega Callia tiene un varietal Tannat 2007 y un blend, Shiraz-Tannat, oscuros y vibrantes con aromas intensos, una característica del cepaje en el Valle de Zonda. En Salta, en los Valles Calchaquíes se da un Tannat viril y potente,- Etchart, Quara, El Esteco-que tan bien le van a empanadas y locros fogosos. Estos Tannat son mucho más Cuchi Leguizamón que Onetti. Ni mejores ni peores. Diferentes, pero siempre expresivos. <br /><br />Y, aunque parezca increíble, se da con características únicas en San Patricio el Chañar, Neuquén. Hay que probar ese Tannat Single Vineyard de la nueva línea Fin de Bodegas de Fin del Mundo. Es otra cosa este vino del desierto. Gran estructura, aromas potentes, ningún desasosiego tánico en el paladar. <br /><br />Descubrí el Tannat patagónico en un viaje a esta Bodega y junto con el enólogo Marcelo Miuras, hicimos un corte exótico para los socios del Club del Buen beber: Tannat-Petit Verdot. Anduvo. Fin, el puro Tannat de la línea Single Vineyard lo supera. <br />