- En una sartén pequeña, poner al fuego los piñones, vigilando que no se quemen.
- En una olla pequeña, verter el agua e incorporar los duraznos con el azúcar glas, la canela y las hebras de azafrán.
- Pasados unos minutos, añadir la mantequilla.
- En una fuente, especiar el pollo con la canela, la pimienta, sal, el aceite de cacahuete, el azafrán y el jengibre rallado.
- En un Tajín (recipiente de barro), calentar el aceite y cocinar el pollo. Agregar la cebolla cortada. Tapar por 20 minutos.
- Cuando esté listo, bajar el fuego, añadir los duraznos y el caldito resultante de su preparación.
- Echar por encima las hierbitas frescas y los piñones. Servir.