El argentino Estanislao Carenzo, propietario del exitoso Sudestada de Madrid y otro sitio especializado en platos de la cocina clásica porteña argentina, acaba de inaugurar, Chifa en el séptimo piso del Corte Inglés en Madrid-Callao, en la Sección Gourmet Experience.
Un espacio para el hedonismo: desde la terraza, especialmente, se puede apreciar la magnificencia de Madrid y su arquitectura. Allí aterricé un mediodía invernal para conocer este espacio inaugurado el día anterior, ya atiborrado de foodies locales. En la barra estaba sentado Jordi Roca, el pastelero del Celler de Can Roca, por ejemplo.
Unos pocos bocados me sirvieron para confirmar que Carenzo es un cocinero genial, como lo pude apreciar también en otra reciente visita al Sudestada madrileño. Sus fusiones no son disparatadas y utiliza los mejores productos como sigue haciéndolo en sus otros lugares. En esta ocasión para recrear sabores peruanos con acentos orientales.
Con una
cerveza, La Virgen elaborada también por Carenzo y compañía, pude probar las Gyozas mendocinas, pequeñas empanaditas de origen japonés, rellenas con aceituna y cerdo; mejillones en caldo de algas; un Chori bao, guiño nostálgico del argentino a sus añorados
choripanes. Este venía adentro de un pan al vapor, chorizo criollo y chiles. Lo mejor: el
chaufita con oreja y cefalópodo, un plato típico de la cocina chifa reinterpretado por Carenzo con encurtidos de col y maracuyá, tan deslumbrante como el tamalito tailandés, con pato servido sobre curry verde picante. Una gloria esta fusión latina-oriental-hispana. Posible por su precios, muy al estilo de la cocina callejera, tan de onda.
Por otro lado, y ya en mi Buenos Aires querida, comí en el Sudestada porteño, inaugurado hace bastantes años y pionero en Palermo Hollywood (Fitz Roy y Guatemala). Sus platos siguen siendo briosos, ardientes y ricos. Lo sigo recomendando. Y aconsejo acompañarlos con el Torrontes de Colomé. Otra experiencia gourmet.