Kale, el verde más sano

Es la rúcula de ahora. Y está desplazando por ese hábito cada vez más extendido de la cocina hìpersaludable, a otros productos. Arrasa en los restaurantes de Manhattan y de allí, por supuesto partió al mundo. Tiene un aurea de bondades infinitas en forma de vitaminas, sobre todo la vitamina K de Kale, minerales y otros etcéteras para esa vida que algunos piensan debería ser eterna.

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Es la rúcula de ahora. Y está desplazando por ese hábito cada vez más extendido de la cocina hìpersaludable, a otros productos. Arrasa en los restaurantes de Manhattan y de allí, por supuesto partió al mundo. Tiene un aurea de bondades infinitas en forma de vitaminas, sobre todo la vitamina K de Kale, minerales y otros etcéteras para esa vida que algunos piensan debería ser eterna.


Identikit del kale, lo que hay que saber
1. Sabe a repollo, con un ligero amargor. Es pinchudo, complicado comerlo crudo en una ensalada, a aunque así lo sirven en muchos lugares.


2. Una buena manera de hacerlo consiste en cortarle los troncos mas duros, y saltarlo con un ajo y oliva en la sartén añadiendo dos cucharadas de agua, es decir aplicando la técnica del braseado. Puede servir como guarnición.

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3. En buñuelos o en croquetas, con huevos, harina y leche, y luego fritos. O en tempura, eso sí con un leve paso por harina o Panko, huevo y agua helada o, mejor aun soda, O simplemente para saborearlos post braseado con un huevo casero pochée por encima.


4. La otra gracia del Kale : imprescindible que sea orgánico. Le hace a su ser, a su esencia.

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