Cinco usos creativos del jengibre

Compartir a través de tus redes
1 Vodka de jengibre: Pela un poco de jengibre y trocéalo. Añádelo a un frasco con vodka y guarda un par de semanas en la nevera. Por una parte, tendrás un vodka que combina genial con miel y un toque de naranja, y por el otro, conservarás tu gjengibre fresco, que luego puedes usar para cocinar.
2. Infusión refrescante: Esta infusión de jengibre se toma fría, con limón y azúcar, y es ideal para alejar el calor, hidratarte y tomar algo rico y distinto.
3. Sirope de jengibre: Combina en un sartén 2 tazas de azúcar, 1 taza de agua, y rebanadas de jengibre fresco al gusto (recomendamos una cucharada y media). Cocina a fuego alto removiendo hasta que el azúcar se disuelva y luego deja hervir y cocina un par de minutos más. Usa con helado, café, cocteles o lo que gustes.
4. Jengibre en conserva: Así como el de los restaurantes japoneses, hazlo en casa colocando 1 taza de vinagre de arroz, 1/4 taza de azúcar y dos cucharaditas de sal en un sartén. Cuando esto hierva, añade una taza de jengibre fresco pelado y rebanado. Deja cocinar a fuego medio-bajo por media hora y luego deja que alcance temperatura ambiente y guarda en un frasco esterilizado.
5. Pollo estilo asiático: Pica en pluma (medias lunas muy delgadas) una cebolla morada pequeña, saltea en aceite de sésamo mezclado con oliva. Añade el pollo en tiras finas y a media cocción, vierte un chorro de miel. Sazona con salsa de soya y teriyaki, un toque de jengibre y una pizca de curry. Espolvorea con ajonjolí y sirve sobre cama de arroz o con tallarines.
Y tú, ¿cómo lo utilizas? Esperamos tu sugerencia.
Novedades
Todas las novedadesÚltimas tendencias, tips, prácticas y recomendaciones.