Food Stylist, Food Branding Strategist, Intagramer: @lauraponts

La pasada semana tuvo lugar en Buenos Aires, la primera edición del #UpSideDownMeet, un evento que reunió a artistas de la red social de Instagram de distintos países. En el acontecimiento se pudo disfrutar de una exposición, como también de una serie de encuentros y talleres prácticos acerca de técnicas y experiencias en Instagram. Entre ellas estaba invitada a participar @lauraponts, artista catalana conocida por sus apetitosas fotos. Laura habló de su recién estrenado libro “Arte Foodie” y de cómo consiguió alcanzar los más de 100.000 followers con un trabajo de gran belleza estética con fotos realizadas exclusivamente con su móvil.

A horas de haber llegado a Buenos Aires, aprovechamos para entrevistar a Laura López Pinos, quién muestra una sensibilidad extrema a la hora de fotografiar escenarios en dónde la comida es la protagonista.
Hace 3 años que Laura abrió su cuenta en Instagram y ya lleva más de 100k seguidores. Con un promedio de 4k likes por foto, se ha convertido también en una referencia para empresas relacionadas con la alimentación, la hostelería, el turismo y la restauración.

Confiesa, que no ha tomado nunca cursos de fotografía, aunque si tuviese más tiempo lo haría y que aún se sorprende cuando la llaman para hacer fotos.



Con una humildad la que la hace brillar como a pocas estrellas digitales, asume su Insta-éxito como algo temporal, una moda. Es por esto que decidió seguir trabajando en el negocio familiar junto a su madre, leal cómplice que acompaña curiosa en esta gran aventura foto-culinaria.

Lejos de las grandes ciudades, en la Villa de Ponts, provincia de Lleida, España, el día a día de Laura es muy distinto a lo que podemos imaginar. Trabaja desde temprano y hasta que baja el sol. Al medio día, utiliza su tiempo de almuerzo para preparar las tres fotos diarias que se ha propuesto subir a su cuenta de instagram desde que la abrió.

En dos horas decide los productos protagonistas del día, cocina tres platos y compagina un cuadro al que fotografiará sólo con la luz natural de su casa.



Esta dulzura cabreada – denominación que acordamos juntas - borra el trabajo de toda una jornada sin dudar si, luego de cocinar y componer una escenografía para fotografiar, se encuentra con un resultado que no le apetece.
Mientras hablábamos hice mentalmente la cuenta, tres años a tres fotos por día son más de 3.200 fotos: “¿Cómo no repetirse?”

@lauraponts, me miró fijo y sin pensarlo respondió: “¡Eso mismo! Todo el tiempo me obsesiono por hacer algo distinto, una creación nueva. Algunas veces se trata de mirar lo mismo desde una óptica diferente, con un sentimiento distinto al que te motivó la primera vez”.

Con el éxito, el gusto de ser una Food Stylist se transformó. En un principio su centro estaba en lograr un resultado que la complaciese, ahora más exigente consigo misma, trata de ponerse en el lugar del observador: No sólo le tienen que gustar las fotos, tiene que sentir que con ellas provocará placer en los usuarios de la red.



Hace pocas semanas, Laura presentó su primer libro de la mano de Editorial Planeta: Arte Foodie. En él podrás encontrar desde sus recetas hasta su técnica para sacar fotos.
Veremos con que nos sorprende esta Intagramer en un futuro. Lo que es seguro: Hay que seguirla de cerca ya que todo indica que esta historia aún no ha terminado.

#Gourmy

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Si quieres seguir a Laura en redes sociales:
Instagram: @lauraponts
Twitter: @lauraponts
Facebook: Laura-Ponts-1182558998425143/

Sigue los eventos del #UpSideDownMeet en http://upsidedownmeet.travellingmobile.com/